La pasamos padrísimo. Hotel chiquito, sencillo, acogedor, tranquilo y nada aglomerado. Muy básico pero con la ubicación que tiene, no te falta nada. El personal nos atendió de maravilla. El restaurante está rico pero caro. Cerca hay muchos restaurantes locales y tiendas, además de un Walmart y un MEGA a los cuales puedes ir caminando. La playa super cerca, aunque no es ideal para niños pequeños. Solo mejoraría los colchones, pues ya están viejitos, aún así, descansamos bien. Definitivamente volvería con mi familia.